El secreto detrás del T-Rex de ‘Jurassic Park’: el trabajo invisible que revolucionó el cine

En 1993, Steven Spielberg asombró al mundo con ‘Jurassic Park (Parque Jurásico)’, una película que redefinió los efectos especiales y marcó un antes y un después en la industria cinematográfica. Sin embargo, detrás del imponente T-Rex —verdadero protagonista del filme— trabajaron incansablemente dos figuras poco reconocidas: Steve Williams y Mark Dippe, los animadores responsables de crear la criatura digital que aterrorizó a toda una generación.

Datos clave:

- Más de seis minutos de metraje del T-Rex en CGI fueron desarrollados en 1992, un récord para la época.

- ‘Jurassic Park’ recaudó 914 millones de dólares en su estreno original, cifra que superó los mil millones tras su reestreno en 2013 (según Box Office Mojo).

La innovación tecnológica fue tan impactante que incluso George Lucas admitió haber retomado su saga galáctica tras ver el trabajo de los animadores: “Nunca había visto nada igual”, declaró en una entrevista en 1994.

“Todo comenzó como un simple experimento. Jamás imaginamos que transformaríamos la industria”, confesó Williams años después. Junto a Dippe, dedicaron meses a perfeccionar la textura de la piel, el movimiento de la mandíbula y hasta el parpadeo del monstruo, sentando así las bases del CGI moderno.

Hoy, más de tres décadas después, el T-Rex de ‘Jurassic Park’ sigue siendo una referencia obligada para directores y artistas digitales. Una criatura legendaria que, aunque nació en la pantalla, sigue siendo real para millones de espectadores.