Scarlett Johansson recuerda la difícil experiencia que vivió hace 21 años rodando con una leyenda de Hollywood

Han pasado más de dos décadas desde que Scarlett Johansson compartiera set con Bill Murray en la aclamada 'Lost in Translation' (2003), bajo la dirección de Sofia Coppola. Aunque hoy en día ambos actores gozan de enorme prestigio, Johansson ha confesado recientemente que aquel rodaje no fue sencillo para ella, especialmente por la diferencia de edad y experiencia entre ambos intérpretes. La actriz tenía tan solo 17 años cuando interpretó a Charlotte, mientras que Murray, con una carrera consolidada, aportaba su particular carisma al personaje de Bob Harris.

En entrevistas recientes, Johansson ha revelado que, si bien reconoce el talento de Murray y la química que lograron en pantalla, el ambiente durante la filmación fue desafiante. “Ahora es una persona diferente”, comentó Johansson al referirse a su colega, sugiriendo que el actor ha cambiado con los años. La actriz ha señalado que se sintió algo intimidada debido al enfoque profesional y al humor impredecible de Murray, lo que le dificultó encontrar su lugar en el set.

La película, que fue un éxito de crítica y público, logró transmitir una conexión emocional sutil entre sus personajes principales, pero Johansson sostiene que gran parte de ese realismo provino de la tensión y la incertidumbre vividas fuera de cámara. Sofia Coppola, por su parte, supo aprovechar esa dinámica para construir el tono melancólico que define a la cinta. “Había mucha improvisación y momentos en los que simplemente teníamos que confiar en lo que sentíamos”, explicó la directora en una ocasión.

El paso del tiempo ha permitido a Johansson reflexionar sobre esos días, reconociendo que la experiencia la ayudó a crecer tanto personal como profesionalmente. Hoy considera aquel rodaje un punto de inflexión, no solo en su carrera, sino también en su capacidad para afrontar retos y trabajar con grandes figuras del cine. Las redes sociales han recuperado fragmentos y anécdotas de la filmación, recordando la importancia de 'Lost in Translation' para toda una generación de espectadores y para una Scarlett Johansson que, a sus 39 años, es una de las actrices más influyentes de Hollywood.